sábado, 21 de noviembre de 2009

Mitzpé Ramón (mirador Ramón)




Beer Sheva es la capital de Negev. Su historia se remonta a la era calcolítica, 1.500 años antes de Abraham. Es la ciudad más cercanamente asociada con dicho patriarca.
Mitzpé Ramón es un pueblo al sur de Beer Sheva, ha sido construído al borde del Majresh (Cráter) Ramón. El pueblo se halla a una altura de 870 metros sobre el nivel del mar y presenta una hermosa vista del monte Ramón, la montaña más alta del desierto del Neguev (1.010 m).
Alguna vez se pensó que era producto del impacto de un meteorito, pero actualmente se sabe que es la cuenca de un antiguo mar.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Encontrando el alma gemela (pintura Chagall)



Extraído de El misterio del matrimonio


"...Encontrar el alma gemela y relacionarse a ella como tal no es nada simple, sin embargo hay tiempos propicios para identificarla (es decir, "recordarla" en su raíz-alma común).

El primero de estos tiempos es Rosh Hashaná, el primer día del año judío. Adán y Eva fueron creados en Rosh Hashaná, y nuestros sabios nos enseñan que fueron creados de veinte años. El día en el que fueron creados, Dios los trajo al Jardín del Edén, que Él había preparado como inmenso palio nupcial. Rosh Hashaná es tanto el cumpleaños del hombre como el aniversario de sus nupcias.
Nos referimos a Rosh Hashaná en nuestras plegarias como Iom Hazikarón, que se traduce generalmente como Día de Recordación, pero que en traducción literal sería Día de la Memoria. Rosh Hashaná es el día del juicio. Dios no sólo nos recuerda juzgándonos por lo que somos en este mundo, sino que también nos recuerda como fuimos antes que nuestras almas descendiesen a nuestros cuerpos, cuando eran "una parte real del Altísimo". Esto despierta Su compasión por nosotros, ya que nuestras almas han descendido de semejante altura a tales profundidades.
Siendo que el mundo está siendo constantemente creado y sostenido desde la conciencia de Dios, en Rosh Hashaná también se es capaz de recordar esa raíz común que comparte con su cónyuge.

Además de Rosh Hashaná -el cumpleaños colectivo de la humanidad- la raíz espiritual de cada uno (mazal) es particularmente accesible en su propio cumpleaños. De modo que el día del cumpleaños es otro momento propicio para identificar (es decir recordar) al consorte espiritual.
Un tercer momento es el aniversario del matrimonio. Bajo el palio nupcial, el alma-raíz de la pareja brilla con todo su poder y atrae bendiciones y conciencia (es decir la memoria) Divinamente inspirada de su unidad esencial. El aniversario de la boda es entonces un momento auspicioso para que la pareja recuerde su raíz espiritual común.
Finalmente "no habían días más gozosos en Israel que el quince de Av y Iom Kipur, porque en esos días las hijas de Jerusalén... salían y danzaban en los viñedos, diciendo ´¡Hombre joven! Levanta la mirada y observa lo que habrás de elegir...´" . Esos dos días son especialmente propicios para hacer acuerdos matrimoniales.

Estos días, entonces, son los que más nos ayudan a recordar tanto el origen del alma individual como la raíz espiritual que uno comparte con su consorte.
Con el fin de recordar, uno debe meditar acerca del origen de su alma como "parte real del Altísimo", comprendiendo de esta forma los enormes recursos y el potencial que posee, que en su mayoría aún no ha usado. Uno entonces logra un máximo de conciencia acerca de su tarea en la tierra y la fuerza espiritual para "elegir la vida" en la firme progresión hacia sus objetivos.
En la vida cotidiana esta memoria se refleja en las esperanzas y los planes compartidos para el futuro, así como para su familia ampliada e inmediata (y para todos aquellos sobre quienes tienen una influencia positiva).
Esto implica, asimismo, que para elegir el consorte espiritual, el criterio más importante (aquel que mejor indica, aunque sea indirectamente, que poseen una raíz espiritual común) es: ¿bregamos ambos de la misma manera para alcanzar los mismos ideales? Quienes buscan consorte deben buscar simplemente una sensación general de afinidad mutua y atracción, junto con ideales y objetivos de vida compartidos. Cuando discuten acerca del futuro común y se proyectan construyendo, o cuando hablan de sus ideales y objetivos comunes en la vida y cada uno se siente excitado acerca de lo que el otro dice.

"Unidad" en su pasado, presente y futuro es lo que define a una pareja verdaderamente predestinada (bashert). Comparten una raíz espiritual común (pasado), objetivos comunes (futuro) y siempre (presente) recuerdan su origen común mientras se encaminan hacia su meta común.

Amor a primera vista
De lo antedicho, resulta claro que uno no debería esperar que en todos los casos surja súbitamente una sensación intensa de predestinación, al encontrarse por vez primera con la esposa predestinada. Como regla, la experiencia de amor de la pareja crece y se desarrolla a medida que ambos lo nutren en el transcurso de su vida conjunta. Sin embargo, cada regla tiene sus excepciones, y podemos encontrar ejemplos en la Torá de esa intensa experiencia conocida como amor a primera vista. Dios Mismo "se enamoró" de Su visión original del pueblo judío practicando con devoción Su voluntad en la tierra. Según nuestros sabios, este amor a primera vista fue el motivo por el que Dios creó el mundo.
Es importante recordar, sin embargo, que este fenómeno es la excepción que prueba la regla].

Hay trece reglas generales mediante las cuales es posible extraer inferencias lógicas de la Torá . Una de ellas es la siguiente:

"Cuando un caso particular incluido en un caso general es destacado, esto es para enseñarnos algo nuevo (una excepción), no es destacado sólo para enseñarnos algo acerca de sí mismo, sino para enseñarnos algo acerca del caso general".

En otras palabras, cada excepción refiere acerca de la regla algo que no hubiésemos sabido sin ella .
En nuestro caso, la excepcional experiencia de amor a primera vista constituye una ilustración de la intensidad y el romanticismo que también alcanza eventualmente el amor progresivo. Lo contrario también es cierto: si la experiencia de amor a primera vista es real, eventualmente accederá a la estabilidad y el arraigo del amor progresivo.
Instancias de amor a primera vista son instructivas también para la mayoría de las parejas que no experimentan tal intensidad al comienzo de su relación. Más que sentir que su amor es deficiente o poco romántico, deberían considerar a los ejemplos de amor a primera vista como portentos ilustrativos de la intensidad a la que su propio amor puede, y es de esperar que logre, llegar.
Esas parejas que experimentan amor a primera vista deben sentirse afortunadas que su relación haya sido bendecida con tal intensidad desde el principio. Al mismo tiempo, sin embargo, deben ser conscientes de que cuanto más impetuoso es el comienzo de la relación, más difícilmente podrá ser estabilizarla después. Con el esfuerzo necesario, el surgimiento inicial de amor verdadero a primera vista se asentará en la regla y podrá arraigarse en las esencias profundas de la pareja. De esta manera el amor de la pareja se desarrollará y crecerá orgánicamente, como en el caso común de amor progresivo.
Por supuesto que no todo lo que aparenta ser amor a primera vista lo es realmente. Si esa experiencia excepcional no tiene nada de la "regla", es decir que no contiene las semillas del amor estable y maduro, probablemente no sea más que una infatuación que se disipará tan rápidamente como apareció

Rabino Itzjak Ginsburg